Todo el mundo sabe que al mezclar amarillo y azul se obtiene verde. Entonces, ¿cómo se obtiene el marrón?

Ya el sol del veinticinco
viene asomando...
Ya el sol del veinticinco
viene asomando...
Y su luz en el Plata
va reflejando...
y su luz en el Plata
va reflejando...

Las primeras estrofas de "El Sol del 25" de Razzano Lombardo y Carlos Gardel.

Era una letra de una canción que interpreté siendo yo muy chico en un acto del 25 de mayo, que he podido conseguir, y que me ha llenado de nostalgia.

Yo actuaba en todos los actos del colegio siempre. No por decisión propia, sino porque era la mejor opción de las maestras por mi memoria y mi discurso. Al principio mucho no me gustaba participar de esos actos, había mucha gente y me avergonzaba por estar allí en el frente solo con la posibilidad de equivocarme en mi letra o que algo pasara. Pero por lo general todo salía bien. Cualquier problema era absorbido por la masa entendedora de que el que está actuando es muy pequeño. He sido San Martín, Sarmiento, Belgrano, y cualquier otro prócer de primera categoría. Nunca un sereno, un vendedor de empanadas, un soldado raso, un alumno más, ahh no. De extra a mi no me agarran. En los actos más organizados firmábamos pseudo-contratos que confirmaban nuestra participación y papel. Había libreto, pero mucho se improvisaba. Música. La bandera que en el futuro sería mía. El discurso aburrido de la directora. Las gradas de madera de aquella hermosa escuela. Algunos chicos que hacían mímica porque no se sabían aún la letra del himno. Nervios. Aplausos. Ahí voy yo...

La deficiencia educativa que se manifestó en los medios a través de las respuestas dispares de los alumnos de una facultad en La Plata provocó que se trajera a la mesa de discusión a la misma educación argentina.
Se han escuchado miles de opiniones. El gobierno también habló. Nada se saca en limpio de todo esto.
Pero una discusión que me llamó la atención fue:
¿Cuál debe ser la relación de trabajo en la escuela/facultad con respecto a la aplicación del mismo en el hogar?
Muchas opiniones salieron a la luz:
- Mi hijo se pasa gran parte del día haciendo deberes. Yo fui a hablar con la maestra y le dije: mi hijo no le va a traer más los deberes hechos en la medida que no se le enseñe acá (en la escuela) a realizarlos.
- Yo creo que debería ocuparse los recreos en resolver los deberes.
- Ahhh, en mi época no pasaba ésto. Uno aprendía en la clase. Y aprendía a aprender.
- Me paso gran parte del día ayudando a mi hija a hacer los deberes. ¡Hasta el sábado! No puede ser.

Una profesora me leía la primera página de una guía de trabajos prácticos:
Dedicación = 20 horas semanales = 6 horas de cursada + 14 horas de trabajo en casa.
Nos miramos entre nosotros y nos reímos en la cara de la mujer. Encima la materia era una materia de Proyectos, donde se estudia como administrar de la mejor forma el trabajo de la gente. Cualquiera sabe que un alumno promedio con 4 materias de 6 horas de cursada del peso de las de ingeniería no le dedica más de 6 horas (si es un capo) a cada materia por semana en casa. Encima la mayoría de los presentes trabaja y pasa entre 6 y 8 horas del día en eso.

Cómo envolver una dona.

Materiales:
- 1 dona de radio mayor R y de radio menor r.
- 1 rectángulo de papel de B = perímetro circunferencia de radio R + un delta y H = perímetro de la circunferencia de diámetro (R - r) + un delta.
- Goma de pegar o cola o plasticola o boligoma o engrudo o algo que pegue papel.

Procedimiento:
1. Poner una gotita de cola en el centro de un lado menor del rectángulo, y cola en toda la extensión de uno de los lados mayores.
2. Ubicar la dona en ese punto haciendo contacto con un punto de la circunferencia mayor de forma tal que al girar (estando pegada al papel) el papel forme un cilindro recubriendo tal circunferencia de la dona. Ahora tenemos un cilindro de papel con una dona en el medio.
3. Recubrir ahora el resto de la dona uniendo los lados mayores del rectángulo en la circunferencia de radio menor. El papel se arruga hacia el centro de la dona, por eso lo pegamos bien para que no se vea.
4. Listo.

¿Vio qué difícil es cuando no viene con un dibujo?

Escenario: Transporte público de pasajeros.

Último asiento del lado izquierdo. Tras la fila de asientos de a uno. El loco miraba por la ventana. Yo a su lado. Empieza a tamborilear con sus dedos, imaginando quizás una canción que había escuchado recientemente, y que le viene ahora a la mente. El sujeto comenzó a silbar un tema que al principio no recordaba, pero que después me vino a la mente. Era "La Soledad" de Laura Pausini, un tema clásico que escuchaba años atrás. A continuación comenzó a interpretarlo ¡EN ITALIANO!. Y no era cualquiera, sonaba muy bien, para tener una voz grave como la mía.
Ante todo esto lo observo. Era un desastre su vestimenta. Podría haber pasado por un linyera tranquilamente. Pero ahí estaba el loco cantando en un italiano perfecto ante la mirada disimulada de la gente del bondi. Unos niños habían dejado de saltar de sus asientos y lo escuchaban atentos.
El siguiente tema fue: Ave María. Si, "Aaaaaaaaaa vveeeeeemariiiiiiii iiiiiaaaaa". El tipo era lo más pero la gente no opinaba lo mismo. Comenzaban a surgir miradas de censura. Él cantaba hacia afuera, como imaginando un público fuera de vehículo que lo ovacionaba.
Para cerrar terminó con Rosa Rosa, de Sandro y confieso que me daban ganas de cantar con él. Total, yo ya estaba a su lado, formaba parte del show. Me limité a seguir su ritmo con mis dedos y mis pies.
Cuando bajó, el viaje ya no fue lo mismo. La rutina regresó y la tristeza y el cansancio volvieron a las normales caras de los pasajeros.

Update: Solución

Hoy se me ocurrió un invento. Vieron que los celulares cada vez vienen con más pavadas, displays de muchos colores, jueguitos y servicios que nunca en la vida uno va a usar.
Propongo un servicio adicional de comunicación entre teléfonos sin saber su número. Planteo un escenario para mostrar el funcionamiento. Imagine que está en un lugar público con mucha gente, y desea saber el teléfono de aquella bella dama del fondo, o de ese importante caballero que nunca le dirigiría la mirada jamás. Uno saca su celular con éste plug-in, lo apunta a su destino, y a modo de "radar" capta los números de teléfono y los datos personales de las personas que lo rodean. Me van a decir: ya existe. Ok, pero yo propongo un sistema automático que no requiera el consentimiento de ambas partes para obtener información. Uno publicaría lo que desea mostrar y cualquiera podría leerlo o bajarlo directamente de tu celular.
Uno de los problemas que tiene el servicio telefónico es éste: La necesidad de ayudarse con un directorio o guía de teléfonos, o de preguntar el teléfono. Con éste sistema, uno nunca más necesitaría acordarse de un número de teléfono de incontables dígitos, sólo apunto, memorizo, y elijo los teléfonos por nombre, nick o un menú, que es más fácil. Se extiende con facilidad a todo tipo de teléfonos.

Si, ya sé, mejor me dedico a lo mío.

El Sistema es todo. El Sistema es nada. El Sistema todo lo sabe, todo lo siente, todo lo decide. El Sistema nos hace creer en los libros: "conjunto de partes interrelacionadas" y muchas otras tontas definiciones. Pero El Sistema es mucho más que eso. El Sistema es quien primero te recibe al nacer, es el que toma la decisiones por ti en toda tu vida, es el primero que nota tu muerte y muchas veces quien la imparte. El Sistema es orden sin secuencia, es memoria carente de recuerdos, es vida predecible, es organización y caos.

Se dice que muchos se enfrentaron a El Sistema. Los maestros transmiten que existen 3 formas de eliminar a El Sistema, una menos recomendable que la otra. Yo elegí la primera y fallé. El ataque directo y frontal es inútil y ocioso. Pudo conmigo y casi determina mi desaparición y la de toda mi familia. Pero aquí estoy. La lucha no ha sido en vano, me ha permitido conocerlo en profundidad, explorar su interior, entenderlo, definirlo con precisión y sin exactitud. He vencido a sus interfases y he llegado muy cerca de su núcleo. He visto sus procesos. He encontrado el origen y el destino de la información.
Pero mis poderes no fueron suficientes.

Una segunda forma es lograr que El Sistema sea completamente ignorado por la gente. Idílico y utópico a la vez. Hoy hemos optado por la tercera opción. No hay nada peor para El Sistema que un Sistema más nuevo, supuesto mejor. El Sistema fue creado por los hombres, por hombres como yo. Capaces de amar, ser solidarios, respetuosos y responsables. Y de ser hipócritas, de mentir y de odiar. Por transitividad El Sistema es así. Pero sólo los hombres pueden reemplazar a El Sistema. Sólo los hombres.

Finalmente el cartel reza: "Cerrado. El Sistema ha caído."

El agente Rodríguez llegó tarde como siempre. La escena del crimen ya había sido examinada por esos policías que nada saben de investigación. Se abrió paso por las cintas que delimitaban la zona de los numerosos mirones y curiosos del barrio. Rápidamente lo seguía su asistente Liu, una joven ingresante con rasgos orientales y conocimientos de artes marciales. Andy Rodríguez trabajó durante 15 años en la fuerza, y había ascendido con rapidez debido a un gran historial de casos absurdos resueltos. Pero ese historial contrastaba con la aparente ineptitud y falta de estado del sujeto.

La casa estaba toda desordenada. Era una valiosa mansión en el norte de la provincia de Buenos Aires perteneciente a la señora Landi. La viuda estaba muerta en el centro del living amueblado con gran estilo. No había tiza marcando el cadáver. Quiere decir que la mujer no había muerto allí precisamente. -Murió acá.- le dijo uno de los últimos agentes de la bonaerense que quedaban. -La ahorcaron de la araña con el cable del teléfono, ¿ve?, la bajamos porque era muy impresionante, y molestaba el paso.-
-Aja. ¿Y qué pasó?.-, preguntó. -Parece que le entraron dos pungas a robar por el fondo y se llevaron las joyas de la vieja, las que tenía en su habitación.-
-Ah, ¿ya saben lo que pasó? ¿Para qué me llamaron entonces? Yo vivo en Avellaneda y me tuve que cruzar medio país para... -Es que es raro que no se hayan llevado nada más. Acá hay platería, cuadros valiosos y una caja fuerte llena de dinero sin tocar. Bueno me tengo que ir, se me enfría la pizza que tengo en el auto. Pasá. Sentite como en tu casa.

-Andy, acá tenés el informe con las últimas llamadas y contactos de la mujer. Recibió una llamada de Capital que duró 4.23 minutos, maso- dijo Liu. -Ah, y tenía en su agenda una entrevista programada con Susana Gimendez de Canal 9 justo para esta hora. ¿Qué hacemos?-

Elija una opción:
1. Investigar más la escena del crimen.
2. Averiguar más sobre la llamada de Capital.
3. Ir a ver a Susana.

Continúa el sábado 8.

Si señora, por si no lo sabía, el llamado Pago Fácil, Rapipago u cualquier otra marca de pago rápido en lugares no-bancarios es uno de los inventos argentinos de mayor éxito de todos. Y es relativamente nuevo. Se dice que los creadores (creo que gente relacionada con Mauricio Macri, el presidente de Boca Juniors) apostaron a una inversión sin saber realmente si iba o no a dar resultado.

Se trata como todos saben de un sistema de cobro de impuestos descentralizado, en el sentido de que existen numerosas sucursales de pago que no son bancos como tiempo atrás sino que son negocios de cualquier clase que adhieren al sistema. La gente puede pagar en cualquiera de estas sucursales, y dada la cantidad de las mismas su objetivo es lograr:
1. Que los clientes paguen sus impuestos o deudas en lugares no tradicionales evitando largas colas.
2. Que los negocios que adhieran al servicio ganen una comisión por ello.
3. Que además de la comisión tienen la posibilidad de exponer sus productos ante decenas de posibles compradores que vienen a pagar cosas.

Hoy día estos sistemas instalados en farmacias, correos, loterías, y muchos otros y recaudan más del 60% de los impuestos y contribuciones a entidades públicas o privadas de todo el país. Nacido en Buenos Aires, poco a poco se fue expandiendo y hoy llega a las principales ciudades del país.

Lo curioso de estos sistemas es que han provocado que hoy día una farmacéutica sepa detectar billetes falsos con la misma habilidad con la que busca remedios y que las empleadas de correos dediquen gran parte de su tiempo a tareas de cobro relegando su trabajo original.